VIENTO DEL SUR
El calor sofocante mantiene a la ciudad bajo su yugo, un agosto más, la ciudad va quedando paulatinamente vacía. Día a día, la intensidad del tráfico disminuye, las plazas de aparcamientos vacíos, florecen en el asfalto y el graznido de las gaviotas se escucha sobre los tejados, recordando que a muy pocos metros, el mar mediterráneo baña las playas de esta ciudad cosmopolita que es Barcelona. Días de calor y noches de insomnios, que van haciendo mella en la actividad…